“ y, volviéndose hacia Alicia, agregó - ¿Cómo te llamas, niña?
- Me llamo Alicia, con el permiso de Su Majestad – dijo Alicia, muy cortésmente; pero añadió para sí: “¡Después de todo no son más que un mazo de naipes! ¡No tengo por qué tenerles miedo!”.
- ¿Y quiénes son ésos? – dijo la Reina, señalando a los tres jardineros tendidos alrededor del rosal. Porque, como yacían de cara al suelo, y el dibujo de sus espaldas era idéntico al del resto de los naipes, la Reina no podía saber si eran jardineros, soldados, cortesanos, o tres de sus propios hijos.
- ¿Cómo voy a saberlo? – dijo Alicia, sorprendida por su propio coraje – no es asunto mío.
La Reina se puso roja de furia y, tras clavar en Alicia una furibunda mirada de bestia salvaje, chilló:
- ¡Que le corten la cabeza! ¡Que le…!”
(“Aventuras de Alicia en el país de las maravillas”, Lewis Carroll)
- Historieta digital, 2021
